Para apreciar al máximo su sabor y textura, se recomienda abrir el envase al menos 30 minutos antes de su consumo y dejar que las lonchas alcancen la temperatura ambiente. Así, los aromas del lomo se desplegarán con mayor intensidad y su untuosidad natural quedará realzada. Ideal para compartir en aperitivos, tablas gourmet o como bocado especial acompañado de pan artesano y un vino tinto joven.