Cómo cortar jamón en casa paso a paso
Cortar jamón en casa puede parecer una tarea reservada a maestros jamoneros, pero con las herramientas adecuadas, un poco de práctica y esta guía paso a paso, tú también podrás disfrutar del corte perfecto para disfrutar en casa de todo el sabor del ibérico.
Ya sea para aprovechar al máximo tu jamón o para sorprender a tus invitados con tu técnica, aquí aprenderás cómo hacerlo de forma segura, limpia y sobre todo elegante.
Herramientas básicas para cortar jamón en casa
Antes de comenzar, asegúrate de tener a mano el material necesario. No necesitas una cocina profesional, pero sí contar con estas herramientas básicas:
Herramienta | Consejos para elegirla | Errores comunes | Mantenimiento básico |
Jamonero | Que sea estable, con base antideslizante y ajustable | No fijar bien el jamón, lo que genera inseguridad | Limpieza tras uso y revisar tornillos periódicamente |
Cuchillo jamonero | Hoja larga (20-30 cm), flexible y bien afilada | Usar cuchillos sin filo o rígidos, lonchas irregulares | Afilar antes de cada uso con chaira |
Cuchillo deshuesador | Cuchilla corta, fuerte y curva para zonas con hueso | Forzar el corte o usar cuchillo largo en zonas óseas | Guardar en funda para evitar golpes y mantener filo |
Chaira o afilador | Tamaño adecuado para el cuchillo, material de calidad | No usarla regularmente, cuchillos sin filo | Limpiar con un paño y evitar golpes |
Pinzas | De acero inoxidable, con buen agarre | Manipular lonchas con manos sucias o húmedas | Lavar y secar bien tras cada uso |
Aunque cada herramienta ayuda, la clave está en la técnica: un cuchillo bien afilado y una buena postura harán la diferencia entre una loncha perfecta y una mal cortada.
Cómo colocar el jamón correctamente
Depende de cómo vayas a consumir el jamón.
- Si vas a consumirlo en pocos días, coloca la pezuña hacia arriba para empezar por la maza, la parte más jugosa.
- Si vas a tardar más en consumirlo, empieza por la babilla (pezuña hacia abajo), que se seca antes.
La clave para poder cortar y manipular el jamón de forma correcta está en fijar bien el jamonero para que tengas espacio libre para moverte con libertad y seguridad a la hora de cortar.
Cómo cortar jamón en casa
Una vez que el jamón está bien colocado en el jamonero (según si vas a empezar por la maza o por la babilla) es hora de poner manos a la obra para realizar un corte correcto y poder aprovechar al máximo el jamón:
- Delimita la zona de corte: Realiza un corte profundo y limpio en la caña (zona próxima a la pezuña), en forma de V o semicircular. Este corte marcará el inicio del loncheado y facilitará el acceso a la carne.
- Retira la corteza y la grasa exterior: Con un cuchillo más firme o puntilla, elimina la corteza dura y la grasa amarilla oxidada de la zona que vas a cortar. Solo limpia lo que vayas a consumir en ese momento para evitar que la pieza se reseque.
- Realiza cortes firmes, paralelos y con calma: Utiliza el cuchillo jamonero sujetándolo con firmeza pero con suavidad: pulgar en el lomo del mango, mano relajada. Corta lonchas finas, largas y translúcidas, siempre en dirección paralela al hueso. No hagas presión en exceso: deja que el cuchillo haga el trabajo.
- Mantén la seguridad como prioridad: La mano contraria debe estar siempre por encima del cuchillo, nunca en la línea de corte. Si eres zurdo, adapta la colocación del jamón para trabajar con seguridad y visibilidad.
- Cambia de cuchillo al llegar al hueso: Cuando notes resistencia o toques hueso, utiliza el cuchillo deshuesador (corto y firme) para bordear y despegar la carne. Así evitarás dañar el filo del cuchillo jamonero y podrás aprovechar al máximo cada parte.
Mejor lonchas pequeñas y finas que grandes y gruesas. El sabor y la textura se disfrutan más.
Consejo de nuestros maestros jamoneros
Conservación del jamón una vez abierto
Para mantener tu jamón en óptimas condiciones durante más tiempo, debe seguir estas recomendaciones de nuestros maestros jamoneros:
- Protege la zona de corte con grasa blanca: Cuando inicies el corte, guarda unas finas lonchas de grasa blanca del propio jamón. Esta grasa, limpia y sin oxidar, actúa como una película natural que protege la carne del contacto directo con el aire. Colócala suavemente sobre la zona expuesta al terminar de cortar. No utilices grasa amarilla ni rancia, ya que puede aportar mal sabor.
- Cubre el corte con un paño de algodón o papel film: Después de aplicar la grasa, es recomendable cubrir la superficie con un paño limpio de algodón, sin olores, o papel film alimentario. El paño permite una transpiración suave, ideal para jamones que se consumen a diario. Si tardas más en volver a cortarlo, el film ayuda a conservar la humedad natural de la carne durante más tiempo. Eso sí, no lo ajustes con demasiada presión: queremos proteger, no asfixiar.
- Guarda el jamón en un lugar fresco, seco y oscuro: El jamón, una vez abierto, debe mantenerse en condiciones similares a su curación:
- Temperatura: entre 18 y 24 °C, constante y sin cambios bruscos.
- Humedad: moderada, evitando ambientes húmedos o secos en exceso.
- Luz: lo ideal es mantenerlo alejado de la luz directa del sol y de fuentes de calor como hornos, estufas o ventanas soleadas.
- No guardes el jamón en la nevera: Un error habitual es guardar el jamón en la nevera, especialmente en verano. Sin embargo, el frío excesivo interrumpe la evolución natural de las grasas, endurece la carne y altera su sabor. El jamón ibérico necesita respirar para conservar sus aromas. Solo en casos extremos (altas temperaturas sin alternativa) se recomienda refrigerar, siempre bien envuelto y durante el menor tiempo posible.
Cortar jamón en casa es una experiencia que une tradición, sabor y satisfacción personal. Con práctica y las herramientas adecuadas, podrás hacerlo como un experto y podrás disfrutar del sabor de estas joyas del ibérico. Y si aún no tienes tu jamón, en nuestra tienda de jamón ibérico encontrarás opciones premium listas para cortar y disfrutar.